lunes, 6 de julio de 2009

Hoy pasé por tu planeta.


Hoy creí pasar cerca de tu planeta,
pero solo fue espejismo de cercanías.
Pensé en aullar cerca de tu puerta
convertido en una de tus adoradas fieras
pero temí delatarme por mis párpados espectantes
mis oidos maltrechos de angustias
de apuradas fantasías de amaneceres
de tejidas tramas inadecuadas, inevitables y calientes.
Pensé ladrar y moverte la cola,
pero me delataría ser demasiado humano,
sin la incondicional mirada de tu amigo.
Entonces decidí maullar una cancion a la luna
y perderme un rato en sombras cercanas
en silentes techos solitarios y espectantes
dejarte saber de mis gastadas garras,
ocultando en una caja mi sed de tus labios.