domingo, 9 de agosto de 2009

Poema vegetariano para una elemental triste.(ver II)



Tus ojos de apio se sienten,
melancólicos y humedecidos
se posan en la tierra fresca
debilitados y entristecidos

Intentas ocultar tus efluvios
color chile dulce maduro,
venenosas bayas cercaron
la vista clara al sembradio.

El zacate antes sabroso
hoy se torna algo insaboro
frutas frescas en la refri
entristecen en reposo

Aquel domador de delfines
ignoró tu piel de hada,
piel de yuca blanca y dulce
desbordandose sus confines,
por un intento de cocecha
de flores silvestres sin olor
aburridas y pasajeras
intrascendentes sin color.

Me sentaré en la distancia a observar
como ondea tu melena zanahoria
Saludando al bosque mientras te dices
nuevos brotes depara la historia

Pronto el tiempo olerá a chocolate,
nuevo fulgor en tus almendras verdes
de oscuro matiz es la experiencia
no habrá tormento cuando grande creces
sabiendo: las cocechas van y vienen.

1 comentario: